Para la undécima edición del Campeonato sudamericano de fútbol (conocido bajo el nombre de Copa América desde el 1975), la organización del torneo es confiada a Perú. Aunque afiliado el FIFA en 1924 y a la CONMEBOL en 1925, la selección peruana hace sus principios en Campeonato sudamericano de fútbol en 1927 y se ve pues encargar de la organización de la competición. Entre otras naciones afiliadas a la CONMEBOL, tres se retiran para esta edición, [pays:49]Chile, Brasil y [pays:54]Paraguay. Otras selecciones participantes son Uruguay (campeón en título), Argentina y Bolivia. Todos los partidos de la competición se celebran en Lima, capital de Perú, en el estadio Nacional.
Las dos primeras selecciones del torneo se cualifican para los Juegos olímpicos de 1928, en la capital de Países Bajos Amsterdam.
En las reglas del fútbol en 1927, ninguna sustitución de jugadores está prevista durante un partido, y el árbitro del encuentro todavía no dispone de tarjetas amarillas y rojas.
Las cuatro selecciones participantes se riñen la victoria en un solo grupo, cada equipo que se encuentra por turno, la primera del grupo llévate la competición. Un partido ganado produce 2 puntos, un empate 1, y una derrota 0 punto.
En caso de igualdad de puntos entre los primeros equipos del grupo, una segunda vuelta está prevista para conocer al vencedor de la competición.
El 30 de octubre de 1927, el Campeonato sudamericano de fútbol se presenta.
En el estadio Nacional de Perú en Lima, 15,000 espectadores están presentes para asistir al primer partido de la competición, Argentina contra Bolivia. Argentinos, campeón doble del Campeonato sudamericano de fútbol, son los outsiders del torneo, detrás del gran favorito uruguayo. Para el seleccionador-jugador de Bolivia Jorge Luis Valderrama, esta segunda participación en el torneo más grande de América del Sur tiene valor de prueba, y no debe ser como la última edición una continuación ininterrumpida de anchas derrotas. El árbitro peruano Sr. Benjamín Fuentes silba el saque de centro del encuentro, y a pesar de la buena voluntad de los jugadores bolivianos, la máquina argentina se pone en camino y Segundo Luna abre el tanteo desde el 18 minuto. Dos minutos más tarde, el delantero de San Lorenzo Alfredo Carricaberry engaña el guardameta boliviano Bermúdez, luego el árbitro silba un penalty para los argentinos a la 24’, el penalty transformado por Humberto Juan Recanatini. Ya 3-0 para la Albiceleste, y Manuel Seoane, el mejor goleador de [comp_annee:3*1925]Campeonato sudamericano 1925, agrava el tanteo a una media hora de juego. Valderrama deja sus ilusiones despegar, y todavía más cuando Alfredo Carricaberry firma un doblado al 36 minuto. 5-0 para Argentina, cuando el joven delantero de 17 años lleno de envidia y de orgullo Mario Alborta traspasa las redes argentinas y salva el honor de Bolivia en este partido (42’). Tiempo silbada, el tiempo del segundo período va a ser penoso y largo para los jugadores bolivianos. Porque los argentinos no son para reírse, Segundo Luna también marca su doblado, antes de que Manuel Seoane haga igual. Tanteo 7-1 final, principio en tocata para Argentina, principio casi rutinario para Bolivia todavía demasiado tierna e inexperta.
El 1 de noviembre, 22,000 espectadores afluyen en el estadio para animar Perú, que va a enfrentarse en el momento de su primer partido internacional con la selección que todo el mundo quiere evitar, el ogro uruguayo. Campeón titular y séxtuplo vencedor del Campeonato sudamericano de fútbol, Uruguay del seleccionador Luis Grecco da la sensación a ser invencible. Los 22 jugadores penetran sobre el césped del estadio Nacional, y la primera sorpresa de este partido es el tanteo a tiempo, 0-0. Perú resiste mucho, pero el 49 minuto es fatal en Santiago Ulloa, que engaña su propio guardameta y da la ventaja a la selección uruguaya. Los jugadores de la Celeste no necesitan este género de golpe de mano, más aun cuando tres minutos más tarde, el delantero del Peñarol Antonio Sacco abre su contador bebió, antes de doblar la postura a la 71’. Héctor Castro termina las esperanzas peruanas al 75 minuto, y el árbitro silba el fin del partido sobre este tanteo sin apelación de 4-0. Para el primer partido, Perú puede estar orgulloso de haber tenido tiempo en igualdad con campeón titular, pero la lógica es finalmente respetada, y Uruguay no vino a Lima para dejar hilar su título.
Cinco días más tarde, Bolivia empieza el segundo asalto de su competición frente a Uruguay. Y qué decir sobre este partido, tanto la diferencia de nivel llama a los ojos. Más aun cuando los agresores uruguayos están en piernas, Pedro Petrone abre las hostilidades hacia el 18 minuto, luego su compañero Roberto Figueroa doble el tanteo un minuto más tarde. El tiempo de soplar para los bolivianos, luego Juan Arremón surge y engaña el tercero el guardameta Bermúdez antes de tiempo (43’). Finalmente, los jugadores bolivianos se dicen que salieron de allí no demasiado mal durante este primer período, pero llega el segundo período al 65 minuto, y comienza entonces un bache enorme en las filas de Bolivia. 65 minuto, Pedro Petrone firma un doblado. 67’, Roberto Figueroa también marca su segundo gol del partido. 68 minuto, Héctor Castro participa en la fiesta. 69 minuto, Figueroa pasa de dos a tres sin fruncir las cejas. ¡ En cuatro minutos, el tanteo es pasado por 3-0 a 7-0! ¡ Increíble! ¿ Entonces, por qué pararse? Petrone acaba su partido por un triplete, y el 86 minuto es el de Héctor Scarone, delantero emblemático del Nacional, que después de una temporada pasada bajo los colores de FC Barcelona, volvió al redil y participa ahora en la fiesta durante este partido. ¡ Tanteo 9-0 final, Uruguay les proporcionó a los espectadores del encuentro una orgía de goles!
Una semana más tarde, Bolivia recalza las grapas y debe enfrentarse con el país huésped de la competición, Perú. Si un partido puede ser ganado por los compañeros de Jorge Luis Valderrama, es bien éste. Entonces José Bustamante no deja ninguna posibilidad al azar y abre el tanteo al 13 minuto. 1-0 para Bolivia, luego el segundo llega en la pisada por el mismo Bustamante (14’). Primera victoria oficial en la historia del fútbol boliviano como nos digo sobre el banco de Bolivia. Demetrio Neyra surge y devuelve esperanza a los 14,000 hinchas del estadio Nacional (31’). Koochoi Sarmiento levanta un clamor de alegría al 41 minuto, antes de que su compañero Alberto Montellanos engañe el guardameta boliviano por tercera vez en este partido (43’). Tiempo es silbado sobre este tanteo de 3-2 para Perú, que supo devolver el partido en su favor, y puede volver a las guardarropas bajo los estímulos de las tribunas. Lado boliviano el golpe es duro, y el segundo período no aporta nada más al encuentro, el árbitro chileno del partido Sr. Alberto Parodi silba el fin del encuentro, y Perú se lleva el primer partido oficial de su historia en este 13 de noviembre de 1927 frente a Bolivia.
El 20 de noviembre, es EL PARTIDO DEL TORNEO. Para este encuentro, el árbitro designado es inglés, Sr. David Thurner. 26,000 espectadores llegan tranquilamente en las calles de Lima y penetran en el estadio Nacional para conocer quién va a llevarse el Campeonato sudamericano de fútbol 1927 entre el vencedor doble argentino de la competición y el campeón titular y sextuplica vencedor del torneo uruguayo. Los 22 jugadores pisan el césped del estadio, y el saque de centro resuena en los tramos. 33 minuto, Héctor Scarone abre el tanteo. Finales del primer período sobre esta ventaja de 1-0 para Uruguay. 56 minuto, el orgullo argentino recobra colores cuando Humberto Juan Recanattini iguala para la Albiceleste. 70 minuto, Segundo Luna asustado las redes uruguayas por segunda vez del partido, y Argentina lleva al tanteo y toma la mano sobre el título. Nueve minutos más tarde, la estrella Héctor Scarone se señala otra vez en este encuentro, 2-2. El fin del partido es próximo, cuando Adhemar Canavessi comete el irreparable y engaña su propio guardameta Capuccini al 85 minuto. 3-2 para Argentina, el silbido final desgarra las tribunas del estadio Nacional. Desilusión para Uruguay, que pierde con este partido la ambición de devolver por séptima vez de su historia el título en las calles de Montevideo, para Argentina la misa es casi dicha, basta ahora con ganar el último partido contra Perú.
Y este último partido, Argentina contra Perú, es sólo una formalidad para los hombres José Lago Millon. El delantero de la Estudiantes Manuel Ferreira abre el tanteo desde el 1r minuto para los argentinos, y a pesar de la igualación de Alejandro Villanueva dos minutos más tarde, la superioridad argentina acaba por hacer plegar la voluntad peruana, el delantero de San Lorenzo Juan José Maglio firmando un doblado en tres minutos (22’ luego 25’), Manuel Ferreira que lo imita a la 30’, antes de que Alfredo Carricaberry acabe el trabajo al 38 minuto. Tanteo 5-1 final para Argentina, que acaba el torneo con 3 victoria en 3 partidos, 15 goles marcados para solamente 4 encajados. Después de haber mirado al rival uruguayo levantarmucho tiempo el trofeo, Argentina se lleva por tercera vez de su historia el Campeonato sudamericano de fútbol y se hace el adversario verdadero de Uruguay en América del Sur.
En compañía de Argentina, los jugadores uruguayos se cualifican para los próximos Juegos olímpicos de verano 1928 en Amsterdam.
Con 3 goles marcados en el momento de esta competición, el delantero Segundo Luna (Argentina), Alfredo Carricaberry (Argentina), Héctor Scarone (Uruguay), Pedro Petrone (Uruguay) y Roberto Figueroa (Uruguay) acaban a mejores goleadores del Campeonato sudamericano de fútbol 1927.